Reshma Ramesh
Nació en Udupi, Karnataka, India, el 20 de abril de 1977. Es poeta -escribe en inglés y lengua kannada-, traductora y activista. Obtuvo una licenciatura en bellas artes y fotografía y ha realizado muchas exposiciones individuales de fotografía a nivel internacional. Su libro de poemas Mosaico de recuerdos, bilingüe en español e inglés, fue galardonado como colección de poesía del año en los premios internacionales de poesía Boao 2024. Reshma tiene el honor único de que su poema se exhiba permanentemente en las ruinas de la antigua ciudad de Olimpos, Antalya, Türkiye. Recibió también el Premio Honorífico Internacional Feminenartfest, el Premio La Luz de Gálata, Estambul, el Premio Internacional Indija Pro Poet de Serbia, y en su país, por tres ocasiones ganadora del Premio a la Mujer triunfadora, el Premio Karnataka, el Premio Savitribai Phule ye el Premio MI, India.
Es poeta residente en Kaavya Sanje y ha desempeñado un papel importante al acercar la poesía a la gente, facilitando recitales de poesía, instalaciones y talleres en espacios sociales como parques, escuelas, mercados callejeros y zonas residenciales, construyendo sólidos lazos socio culturales, que involucran a personas con diversas capacidades, gente LGBTI, en diversas comunidades rurales y urbanas. Ella ha expresado versos en solidaridad con las voces de los oprimidos y marginados, reflejando el entorno político y sociocultural de un tiempo y espacio determinado.
Su obra ha sido publicada en varias antologías internacionales y revistas de poesía y sus poemas han sido traducidos al bengalí, serbio, francés, malayo, turco, albanés, italiano, mongol y español. Ella ha aportado traducciones y relatos para varios documentales relacionados con el medio ambiente y ha participado en Festivales Internacionales de Poesía y Literatura en Serbia, Turquía, India, Mongolia y Malasia. Reshma también es una voz prominente en una de las plataformas de poesía más importantes, Kavya Sanje, en Bangalore.
-Poemas 30º FIPMed
-La función de la poesía en la transformación de la sociedad artículo para el 30º FIPMed
Esta es una muestra de sus poemas:
Gaza
Segundos antes de tu próxima
comida perderé una oreja,
algunas costillas o mi hígado
sangrará hasta confundirse
con los escombros una parte
de mi vecino Azzan, la pelvis
destrozada de su hermana las
pesadillas de mi tía, todo
sepultado con mi ojo que
estallará desde una diminuta cuenca.
Todo cuanto pido es
Repónganme un ojo, un ojo es
todo lo que requiero para
escrutar los ojos del soldado
que bombardeó mi casa yo
quiero preguntarle si acaso en
su país los niños se convierten
en poemas cuando mueren?
Acaso se conviertan en
palabras que a los labios de
todos los humanos les será
prohibido murmurar,
Gaza, serás liberada algún día?
Tú que bombardeaste mi casa
reponle un solo dedo a mi madre
Un dedo es todo lo que
necesita ordenar mis juguetes
esparcidos con pedazos de
mis piernas y para buscar
frenéticamente los pulmones
de su marido, pulmones
gritando nuestros nombres
Reponle a mi padre un pulmón
al menos porque él sueña que
algún día va a trabajar como
todos los otros y a respirar libertad
Por favor reponle un pie
pequeño a mi hermanito que
aprende a caminar, después
caminará sobre toda esta tierra
excesivamente empapada en
sangre, y mañana todo río y
todo mar serán ruina donde tu
silencio hará eco por siempre.
Traducción de Rafael Patiño Góez
Este poema
Este poema es una casa con puertas cerradas
donde el invierno se detiene a mirar libros,
en páginas de familiares o la ausencia de estas.
Este poema está mirando por la ventana,
intercambiando ciudades, divididas.
Comenzando a dibujar el mar en sus líneas, línea por línea,
como un soldado caminando con botas pesadas pensando en casa.
Este poema es un barco de papel que navega de ti a mí,
blanco y negro, mojado, llevando niños e islas
quienes sueñan con despertarse junto a su madre.
Este poema es una calle donde algún día, algún día,
nos encontraríamos para encontrarme dibujando
nuestra ausencia, con tu mano en mi pecho.
Este poema, es un poema que llega por segunda vez
a un niño cubierto de hollín.
Sonido de sus palabras, recordándote que
nunca te fuiste de donde empezaste.
Si fueras como yo
Si tu fueras como yo,
conocerías
un sitio que solías visitar hace mucho tiempo,
un lugar donde no hubo despedidas, sólo sombras de fábulas,
donde un río fluye a nuestro alrededor en silencio
y escucha el suave latido de tu corazón.
Conocerías,
la noche en la que se dibuja un mar desde una ventana,
una noche donde llenabas mis heridas con tus poemas,
y el viento es de arcilla.
Si tú fueras como yo,
Conocerías,
Que algunas cosas permanecen con nosotros y otras flotan lejos
y doblarías un río en mis manos
para que cuando te vayas
recuerdes tus pasos desvanecidos
Noche
Me gustan mis noches quemadas por el sol
subdesarrollado y naciente,
tal vez un poco de poesía y memorias juveniles,
me gusta que mis noches se estrechen rápidamente en plazas
un rompecabezas de nombres,
y un escape de silencio,
vientos de claveles,
un resbalón de lengua,
un maletín lleno de olores,
una tarde en tus ojos.
Me gusta que mis noches sean tu lengua
que pueda dar un beso en un colchón
y dejar cerrar mis ojos en tus verbos
Me gustan mis noches sólo para sean una noche ordinaria
en la cual tus suspiros vayan y vengan
y en la mañana se retire a la luna
Esto no es un poema
Son palabras llenas de carne
las que salieron al toque de queda
son espinas de pescado de una canción
un sobre sin palabras
nudo enredado de Chinars* en llamas
entrega de un pan medio cocido
pizarra negra vacía en las escuelas
es el silencio de la nieve en Gupkar**
la luz que se desvanece en tu pupila.
Es un testimonio de que la bala encontró
la locura de un tío materno
la ráfaga del perdón en
un ojo montado en perdigones o una lengua inclinada
aperitivo empapado en oraciones.
Esto no es un poema
¿Porque quién tiene tiempo
para escribir un poema a
un lugar que nunca visitarás?
¿Quién tiene tiempo para escuchar las voces
de una casa vacía?
¿Quién tiene tiempo para mirar en los ojos
de la gente?
que pueden desaparecer
mañana en tumbas
si por casualidad
te olvidaste como
Normalmente haces
esto no es un poema
*Los majestuosos árboles de Chinar (cuyo nombre botánico es Platanus orientalis o plano oriental) crecen hasta 25 metros, con una circunferencia de más de 50 pies en algunos casos. Estos árboles figuran notablemente en la literatura y la política de Cachemira; Religión y romance.
No es el Chinar durante el verano, cuando todo es verde, lo que atrae a las multitudes, sino el Chinar durante el otoño. Para eso es cuando sus hojas adquieren variados tonos de colores: rojo sangre, malva, ámbar y amarillo
*Gupkar Road es la avenida de poder, hogar de los principales políticos de Cachemira, gobernantes hasta que se produjo un calado frío desde Delhi en agosto.
Traducción de Uriel Antonio Molina