Valentina Rojas
Nació en Envigado en 1998. Es poeta, docente, tallerista y gestora cultural. Es colaboradora en diversos medios digitales literarios del país, participante en el Colectivo Artístico y Cultural de la Revista Innombrable, miembro del comité organizador del Encuentro de Poetas de México en Diálogo con Poetas del Mundo, Cuernavaca Poesía. Autora del libro bilingüe La desnudez de la sombra / The Shadow's Nakedness (2023). Fue pre-jurado del Premio Nacional de Libro de Cuentos R.H. Moreno Duran Sub-35 y del Primer Premio Nacional de libro de cuento Infantil Yolanda Reyes. Sus textos pueden ser encontrados en diferentes antologías, Revistas y sitios web. Sus poemas han sido traducidos al inglés, italiano y árabe. Ha participado como presentadora y poeta en festivales y eventos nacionales e internacionales entre los que destacan el Festival Internacional de Poesía Ignacio Rodríguez Galván en México, el recital de poesía "Quiero decir muchísimo", recital de poesía por los 471 años de la fundación de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Lima, Perú, el Tercer y Cuarto Coloquio Internacional de Poesía y Filosofía de México, el 29° Festival Internacional de Poesía de La Habana y el Festival de Poesía por el Agua.
La vida como un acontecer poético, articulo para el 35º FIPMed
Poemas 30º FIPMed
Esta es una muestra de sus poemas:
Nombrar
Levantarse con las alas rotas
pronunciar la palabra vuelo
plegaria que abriga los huesos
vocablo a vocablo
el viento toca la luz
que creías olvidar.
Ausencia
No fueron los labios
los que borraron el reflejo
la historia rota
fue el silencio
el que se ofreció al día.
Nombrar la ceniza
La ternura se ha hecho piedra
a espaldas de dios
ha caído con el hierro en la boca
buscando el perdón
que no es ofrenda en tierra fría
ya los pájaros asediados
no encuentran nido
a ojos cerrados
grita un linaje
no quiere morir tras el sesgo:
dónde marcha la grieta que quiere abrirse al mundo
la noche oscura
es un trueno en la llaga
el huésped calla
bajo el pecho homicida.
Acontecer
Cuánto cuesta abrigar los fragmentos
mirarse las manos, llamarse lejano
levantar una palabra
húmedo borde para sostenerse
con la cabeza en alto
encarar el frío
se escuchan cantar todavía
las aves en medio de la niebla.
De lo interior
El sol llega a la palma de la mano,
intentamos beberlo a sorbos
bajo una mirada de araña
oculta en las paredes
el golpe de la luz atraviesa el velo
que reclama el aire
desvanece
la herida.
Luciérnaga
Un día la vida acontece
y se teme al silencio del infinito
se camina y se nombra
entre lo no sabido
las huellas se convierten en lo único certero.
Allí habita una luz
como una luciérnaga enciende y apaga
eso, llamado incertidumbre
enigma sagrado que nos reviste.